sábado, 19 de septiembre de 2009

La nueva ley de extranjería en España

Mientras al nivel social todas las leyes del gobierno español ofrecen o legalizan los nuevos derechos (la ley del matrimonio homosexual, la ley pareja de hechos, la ley de igualdad, la ley de los disminuidos, la ley del aborto, etc), sólo la ley de extranjería recorta los pocos derechos que había en España y endurece las condiciones para que los inmigrantes puedan establecerse en España. Es cierto que ningún país puede soportar todas las “avalanchas” de los inmigrantes que llegan por tierra, mar y aire. Es cierto que al ritmo que crecía la inmigración no era posible una buena integración y había que limitar sus derechos para evitar una desintegración social, pero no deja de ser paradójico que un gobierno de izquierdas haga leyes igual de duras o más que los distintos gobiernos de derechas en Europa. Una vez más se confirma la muerte de las ideologías en las sociedades occidentales.

Optar por la inmigración (1)

Quisiera compartir con los navegantes una historia que canta Jean-Jaques Goldman, cantante y compositor francés. En la canción Lá-bas cuenta la historia de una pareja recién casada que se encuentra en dificultades económicas, y el marido decide marcharse a otros lugares donde las cosas no parecen ir mal. El marido tiene motivos para migrar, pero su esposa encuentra motivos para no hacerlo. Aquí ofrezco a letra de la canción:


Là-bas
Tout est neuf et tout est sauvage
Libre continent sans grillage
Ici, nos rêves sont étroits
C'est pour ça que j'irai là-bas
Là-bas

Faut du coeur et faut du courage
Mais tout est possible à mon âge
Si tu as la force et la foi
L'or est à portée de tes doigts
C'est pour ça que j'irai là-bas

N'y va pas
Y'a des tempêtes et des naufrages
Le feu, les diables et les mirages
Je te sais si fragile parfois
Reste au creux de moi
On a tant d'amour à faire
Tant de bonheur à venir
Je te veux mari et père
Et toi, tu rêves de partir

Ici, tout est joué d'avance
Et l'on n'y peut rien changer
Tout dépend de ta naissance
Et moi je ne suis pas bien né

Là-bas
Loin de nos vies, de nos villages
J'oublierai ta voix, ton visage
J'ai beau te serrer dans mes bras
Tu m'échappes déjà, là-bas

J'aurai ma chance, j'aurai mes droits
N'y va pas
Et la fierté qu'ici je n'ai pas
Là-bas
Tout ce que tu mérites est à toi
N'y va pas
Ici, les autres imposent leur loi
Là-bas
Je te perdrai peut-être là-bas
N'y va pas
Mais je me perds si je reste là
Là-bas
La vie ne m'a pas laissé le choix
N'y va pas
Toi et moi, ce sera là-bas ou pas
Là-bas
Tout est neuf et tout est sauvage
N'y va pas
Libre continent sans grillage
Là-bas
Beau comme n'imagine pas
N'y va pas
Ici, même nos rêves sont étroits
Là-bas
C'est pour ça que j'irai là-bas
N'y va pas
On ne m'a pas laissé le choix
Je me perds si je reste là
C'est pour ça que j'irai là-bas

N'y vas pas
Là-bas
Tout est neuf et tout est sauvage
Ici les autres imposent leurs lois
Tout est neuf et tout est sauvage...
Libre continent sans grillage.

(lee los siguientes comentarios míos)

Optar por la inmigración (2)

Hay quienes migran huyendo de la guerra o de las peores situaciones económicas. Normalmente uno marcha de su pueblo nativo para salvar su pellejo o para dar un buen futuro a los suyos. Nadie abandona a los suyos por motivos románticos. Al contrario, muchas veces uno tiene que elegir dramáticamente entre su familia y su futuro. Es lo que nos resume el genial Jean-Jacques Goldman en esta canción en forma de diálogo.

A. El marido defiende sus sueños:
Quiere migrar porque ahí todo es nuevo y salvaje. Es un continente libre de grilletes. Aquí sus sueños son muy limitados. Sabe que le hará falta el corazón y la fuerza. Si tienes energía y fe, el oro se encuentra a tu alcance.

B. La esposa le da motivos para no migrar:
No te vayas porque ahí hay tempestades, naufragios, fuegos y demonios. Te veo muy frágil. Quédate conmigo. Tenemos que seguir haciendo el amor. Te prometo que seremos muy felices. Yo te quiero marido y padre de mis hijos pero tú sueñas con marcharte.

C. La respuesta del marido:
Aquí todo está perdido y no se puede cambiar nada. Todo depende de dónde naciste y yo no he nacido en un lugar adecuado.

D. El chantaje emocional de la esposa:
Lejos de nuestras vidas y de nuestro pueblo, me olvidaré de tu voz y de tu cara. Me gustaría abrazarte en mis brazos pero tú te escapas para ahí.

E. El marido argumenta su decisión:
Ahí tendré mi suerte, mis derechos y la elegancia que aquí no tengo. Todo lo que te mereces te pertenece a ti. Aquí son los otros que imponen sus normas. Puede que te pierda ahí, pero me perderé yo mismo aquí si no me marcho. La vida no me ha dejado la elección. Lo nuestro será posible sólo ahí. Es un continente sin ataduras, bello como jamás te habrás imaginado. Me perderé si me quedo aquí. Por eso me marcho a ese lugar donde todo es nuevo, salvaje, libertad.

F. Al final, ¿qué?
La canción Là-bas anuncia el drama de muchos inmigrantes que tienen que elegir entre su familia y sus oportunidades económicas. Al final el marido pone en peligro su matrimonio y se marcha en busca de una tierra soñada. Se separa de su mujer, tal vez temporalmente. Al menos es lo que deja entender Jean-Jaques Goldman en el video que circula por internet ( ).

Todos conocemos mujeres latinoamericanas que cruzaron el Océano, solas, para buscar un futuro mejor en España. Seguro que habremos visto esas mujeres limpiándose las lágrimas mientras dan órdenes a sus hijos por teléfono desde un locutorio. Se empeñan en mantener vivas sus sueños y sus promesas, y si hay que mentir para que los otros sigan soñando, lo hacen. Seguro que hay de todo en la viña del señor, pero dudo mucho que alguien pueda migrar por capricho o por sueños románticos.

viernes, 11 de septiembre de 2009

Empresarios y trabajadores se necesitan mutuamente

Oigo gente diciendo que son los empresarios quienes crean puestos de trabajo y mantienen la estabilidad de la economía. Los trabajadores serían unos simples parásitos. Por eso hay que exigirles máxima producción, más disciplina y menos protesta. Algunos trabajadores piensan que los empresarios son unos simples explotadores que por un céntimo son capaces de remover Roma y Santiago. No les importarían nada más que beneficios.

Yo pienso que empresarios y trabajadores son dos partes inseparables para una buena marcha de la economía. Algunos empresarios se han creído imprescindibles porque son ellos que dan trabajo. Para ellos, los trabajadores son piezas reemplazables sin que la marcha de la empresa sea afectada, unos simples números prescindibles sin que pase nada. Así pueden pensar algunos empresarios clásicos y conservadores. Olvidan que la actual economía es una economía de consumo, y que quienes consumen son los trabajadores. Si los trabajadores no tienen liquidez para comprar casas o remodelar las que ya tienen, la empresa Roca se irá a la ruina. Si los trabajadores no compran coches, los concesionarios se irán a la ruina. Los empresarios crean puestos de trabajo porque hay trabajadores con liquidez que se convierten en consumidores. Si dejamos de consumir un producto, por muy fuerte que sea la empresa, acabará hundiéndose. Por eso creo que las relaciones entre empresarios y trabajadores tienen que ser equilibradas. Ambos son partes imprescindibles de una misma unidad y se necesitan mutuamente.

domingo, 6 de septiembre de 2009

¿Qué hacen los presidentes de las comunidades autónomas?

Entiendo que hay que exigir responsabilidad al gobierno central, y me parece justo que si ZP no es capaz de sacarnos de esta crisis económica en lo que queda de la legislatura no goce de los votos mayoritarios. Tenga o no tenga culpa de esta crisis, él es la cabeza visible, el responsable del gobierno. Aunque me parece que hay más responsables que se esconden por ahí. Sino, ¿qué pintan los presientes autonómicos si no son capaces de crear puestos de trabajo en sus comunidades autónomos?

¿Esperanza Aguirre o Montilla no tienen responsabilidad en la marcha económica de sus comunidades? Si no son responsables, ¿qué pintan entonces sus diputados autonómicos y provinciales, sus concejales en los ayuntamientos o sus alcaldes? ¿De verdad son imprescindibles los presidentes autonómicos? Porque si no asumen sus responsabilidades, para bien y para mal, sus tareas pueden ser asumidas por funcionarios del estado. Los delegados y subdelegados del gobierno son funcionarios del estado, cumplen bien sus funciones y podrían asumir perfectamente algunas tareas de los presidentes de las comunidades autónomas, dejando en nuestras manos las criticas a ZP o al presidente de turno. Ahorraríamos dinero y hasta tal vez ganaríamos en higiene política. Saber criticar a su rival cada vez que ve un micrófono delante no es motivo suficiente para justificar el sueldo de un político.

España no es Alemania

Me duele afirmar la obviedad, sobre todo porque yo también soy víctima de esta obviedad. No sé cómo hemos llegado a comparar nuestra economía con las grandes economías mundiales. No entiendo a quienes exigen que salgamos de la crisis económica al mismo ritmo que Alemania, Francia, Italia o Japón. Por desgracia o por fortuna, España no es Alemania. Ni tenemos industrias históricas como estos países, ni tenemos sus infraestructuras, ni tenemos sus tecnologías. No podemos compararnos con quienes hasta hace unos pocos años nos han estado dando sus fondos.
Se dice que en los años 2000 la economía iba bien. Pero, ¿qué ha pasado con esas empresas creadas en esos años y que daban trabajo a tanta gente? Ah, ¿que no se crearon ninguna? Es lo que pasa cuando el sector de la construcción se convierte en motor de la economía: escasean los consumidores. Uno no cambia de piso como hace con un coche, un ordenador o un teléfono. Pan para hoy, hambre para mañana. ZP ha aprendido la lección de su predecesor.

Progresistas y conservadores

Hace unos días, un amigo y yo fuimos a visitar a otro colega nuestro. En el camino fuimos hablando de las ideologías. Me decía que él era del centro-derecha y yo le decía que ese espacio central no existe en política. Ante el matrimonio de los homosexuales, el aborto, la eutanasia, el racismo, la tolerancia, la paz, la avaricia, etc, cabe rechazo o aceptación. No sirven las medias tintas. Ante los temas fundamentales de la vida no cabe quedarse bien con todo el mundo. El espacio “light” es infantil. Los mayores toman partido en los temas decisivos. Por supuesto que no nos pusimos de acuerdo.

Conté esta conversación a otro amigo mío que es sacerdote. Al final terminamos hablando de conservadores y progresistas. Uno se autoproclama conservador pero no dice qué valores conserva y qué valores rechaza. Otro se confiesa progresista pero no aclara qué valores le repugna y qué valores quiere resaltar. Cuando un responsable religioso asegura que es conservador debería estar afirmando que vive de acuerdo con los valores Jesús: un hombre bueno, que perdona a los pecadores, que no condena a nadie, que siempre tiende la mano a ladrones y prostitutas, que pone los bienes materiales al servicio de los demás, que no le preocupa el qué dirán, y que muere para que otros vivan mejor. Estando de acuerdo con estas observaciones, mi amigo huía de la coherencia que tiene que haber entre la fe y el estilo de vida. Estaba de acuerdo conmigo en que algunos sacerdotes conservadores llevan un estilo de vida que nada tiene qué ver con Jesús. Pero me decía que ellos son portavoces del papa, y que no son responsables de las enseñanzas de la autoridad eclesiástica. Me decía que se siente como un diputado que tiene que seguir la disciplina del partido y que muchas veces vota leyes que no le convencen: “ni yo puedo ir en contra de las enseñanzas de la iglesia, ni el diputado puede ir en contra de la doctrina de su partido”. “Entonces, ¿sois marionetas?”, le pregunté. Me miró, se rió y no dijo nada. Si no fuera mi amigo le hubiera llamado hipócrita. Pero sí que le dije que esa forma de pensar y de comportarse hace que huyamos de la iglesia y de la política.

Ser conservador es conservar ciertos valores. Quien se proclama conservador debería tener muy claro qué valores conserva, y qué valores rechaza. Hace tiempo me decía una amiga que ciertas personas de su entorno familiar son miembros de un sector que se autoproclama conservador dentro de la iglesia católica. Según mi amiga, estos conservadores no entienden cómo ella puede trabajar con los inmigrantes, y se escandalizan cuando les cuenta que algunos “sin techos” han estado sentados en el sofá de su casa. Yo le consuelo diciéndole que en el infierno hay plazas para todos. Le digo que me troncho de risas cuando alguien me dice que es de derecha o de izquierda, conservador o progresista. Lo que realmente importa es que los seres humanos sean humanos, buena gente.