Cuando las cosas van bien, parece
que todo está de nuestra parte. El mismo ritmo de la vida nos facilita la
integración en el seno del universo. Pero, ¿Qué ocurre cuando las cosas no van tan bien, cuando todo
el esfuerzo para alcanzar los sueños personales y comunes parece estéril?
¿A dónde acudir para que se nos alivie el dolor por la decepción o por el
continuo fracaso? ¿Cómo seguir caminando cuando perdemos alguien importante
en nuestra vida o cuando todos nuestros planes se van al garete? Antiguamente, la fe en la Divinidad era un
consuelo bastante eficaz en el camino de mucha gente. Últimamente, la ciencia
médica parece ocupar su terreno, seguido muy de cerca por las distintas ramas
de la psicología.
No
hace falta recordar que los últimos acontecimientos globales han puesto en
crisis todo un sistema sobre el que cimentábamos nuestro futuro inmediato. Las crisis
de los valores humanos ha llevado consigo la avaricia económica, provocando
inmediatamente la quiebra del sistema financiero y el derrumbamiento de la
esperanza de muchas personas que aspiraban a tener un futuro mejor gracias al
esfuerzo y al buen estado del mercado laboral. Desconocemos el número aproximado de
quienes, ante la angustia causada por la precariedad económica, optaron por
suicidarse. Algunos gobiernos prefirieron rescatar a los bancos
antes de ayudar a sus ciudadanos. Quienes antaño pedían a gritos la expulsión
de los estados en el sistema financiero han tenido que rogar desesperadamente
su aval. Se han dado casos en los que los trabajadores fueron invisibilizados
por los empresarios, cuando realmente los mismos trabajadores son parte
imprescindibles en el fortalecimiento de las empresas. Todos aquellos que habían confiado su
futuro y su consuelo en el trabajo remunerado han visto cómo su optimismo se ha
ido desmoronando. Aunque resulta obvio, es muy difícil mantener la
esperanza en tiempos de descrecimiento económico. Ahora bien, si el dinero no
puede satisfacernos, ¿a qué fuentes acudiremos en tiempos de crisis? Hasta
la próxima entrada.
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