CAPITÁN MBAYE DIAGNE |
Al día siguiente del atentado
mortal de los Presidentes rwandés (Habyarimana)
y burundés (Ntaryamira) en el avión
Falcón-50, la Primera Ministra rwandesa (Uwilingiyimana)
y su marido fueron asesinados en su refugio (en las instalaciones de la ONU
protegidas por los famosos Cascos Azules) por los elementos de la Guardia
Presidencial. Se
sabe que los cinco hijos de la Primera Ministra fueron salvados de una
muerte segura por un Casco Azul senegalés, el Capitán Mbaye Diagne
(según cuenta su entonces jefe, el General canadiense Romeo Dallaire y numerosos testimonios). Tal vez éste fue el primer
acto heroico del Capitán Mbaye, pero
no fue el único. Tras esconder los hijos de la Primera Ministra en el Hotel de
Mil Colinas, y más tarde conseguir evacuarlos a Suiza, Mbaye se dedicó a salvar
la vida de los tutsi amenazados por los milicianos enloquecidos que no tenían
más objetivo que ejecutar a quienes consideraban cómplices de los combatientes
tutsi de FPR. Se habla de más de 600 vidas salvadas por el Capitán Mbaye.
El General Dallaire dice que Mbaye era el más fuerte de
todos: «il était le plus courageux de
tous». Por la noche, recorría las calles de Kigali rescatando civiles
amenazados que llevaban al Estadio
Amahoro (paz) bajo protección de los pocos Cascos Azules que quedaban en
Rwanda. El
31 de mayo de 1994, cuando las matanzas se contaban por diez mil muertos al
día, el Capitán Mbaye murió bajo los disparos de FPR, justamente cuando se
encontraban en un check-point de los militares gubernamentales intentando
negociar el intercambio de prisioneros, uno más de los que había conseguido. Irónicamente, el salvador de los
civiles tutsi cayó bajo las balas de los combatientes tutsi, en su vehículo de
los Cascos Azules. El especialista en las negociaciones desapareció en Rwanda,
lejos de su tierra natal, abandonado por la Comunidad internacional, igual que
todos los rwandeses.
Quienes
conocieron al Capitán Mbaye sostienen que la comunidad internacional ignoró completamente la
entrega heroica de este soldado senegalés simplemente porque no era blanco (según afirma el escritor Boubacar Boris Diop). «Comme le dit à juste titre le journaliste
Mark Doyle, je n'ose imaginer ce que le monde aurait dit de lui si ce héros avait
été blanc». En 2010, una asociación en su memoria
fue fundada para que su memoria no fuera olvidada. Dirigida por su viuda Yacine Mar Diop, la Association du Capitaine Mbaye Diagne pour la Culture de
la Paix, cuenta en sus miembros con los hijos
del Capitán (Cheikh y Coumba), sus antiguos compañeros
militares como el coronel Babacar Faye o
Mark Doyle (periodista de la BBC que
cubrió las matanzas).
En julio
de 2010, su viuda y sus dos hijos recibieron la Medalla Umurinzi
(protector) de manos del Presidente rwandés, que señaló que el pueblo rwandés
estará siempre en deuda con el Capitán Mbaye por haber mostrado al mundo entero
el sentido de Ubuntu africano: «Pour
votre bravoure et votre sacrifice pendant le génocide du 1994, et pour montrer
au monde la vraie signification de l’Ubuntu africain, le peuple rwandais vous
sera toujours endetté». En 2011, en la conmemoración de 17 años del
fracaso de la humanidad en Rwanda, la entonces Secretaria de Estado
norteamericano, Hillary Clinton le
rindió un homenaje póstumo (a pesar de que su marido, entonces Presidente de
EE.UU, puso todo tipo de trabas para que la comunidad internacional
interviniera en Rwanda).
Recordemos
que las matanzas de más de un millón de rwandeses comenzaron con el atentado
mortal del Presidente Habyarimana el día 6 de abril 1994, la ejecución de la Primera
Ministra el día 7 de abril, la huida precipitada de 780 Cascos Azules belgas el
16 de abril (después de perder 10 de los suyos) y la resolución 912 del Consejo
de Seguridad de la ONU que redujo vergonzosamente el número de los dichosos
Cascos Azules (de 2500 a 270), abandonando así el pueblo rwandés en manos de
los uniformados y milicianos con las ganas locas de matar. El éxito de la
“solución final” es incuestionable: más de un millón de muertos en cien días,
más de dos millones de refugiados rwandeses en los países limítrofes (Rwanda
contaba con seis millones de habitantes) y un país reducido a escombros. La mayoría de los
los rwandeses estamos vivos porque fuimos salvados por alguien, llámese el
Capitán Mbaye o Paul Rusesabagina.
Algunas fuentes:
http://www.jeuneafrique.com/Article/ARTJAWEB20130614114231/senegal-tutsis-hutus-fprmbaye-ndiaye-le-heros-senegalais-du-genocide-rwandais.htmlhttps://www.facebook.com/pages/Association-du-Capitaine-Mbaye-Diagne-Nekkinu-J%C3%A0mm/193623944006365
http://www.rnanews.com/grandslacs-sante/4947-les-etats-unis-honorent-un-capitaine-senegalais-qui-a-sauve-600-tutsi-
http://www.pbs.org/wgbh/pages/frontline/shows/ghosts/video/capt.html