sábado, 6 de julio de 2013

¿Quién es el padrino de los dirigentes africanos?



Thomas Sankara, un mito para muchos africanos

Cuando era adolescente, recuerdo haber visto en "Jeune Afrique" una secuencia de imágenes sobre el asesinato de Thomas Sankara. El joven Presidente conocido como "el Che Guevara africano" fue asesinado durante un golpe de estado militar, descuartizado y enterrado en una tumba sin nombre. Había sido Comandante de una Academia militar, Secretario de estado de comunicación, Primer Ministro y Presidente de Alto Volta (Burkina Faso) a los 33 años.

Sus padres querían que fuera sacerdote católico pero al final optó por el ejército, acabó confesando las ideas marxistas, adorado por muchos jóvenes africanos como "el Che Guevara africano" y pidiendo una segunda versión de la Biblia para los pobres porque «Entre les riches et les pauvres, il n’ y a pas la même moral. La Bible, le Coran, ne peuvent pas servir de la même manière celui qui exploite le peuple et celui qui est exploité. Il faudra alors qu’il y ait  deux éditions de la Bible, et deux éditions du Coran ».

Thomas Sankara, le petit frère

Sus colegas africanos le consideraban el hermano pequeño (petit frère) y los franceses querían controlar su agenda. En una ocasión, una periodista francesa le preguntó al presidente Sankara que qué había ido a hacer en Moscú porque esa visita inquietaba a Francia. Sankara, sentado al lado del todo poderoso Miterrand, con mucha delicadeza contestó que siempre responde a todas las invitaciones y que si no hace más viajes al extranjero es porque no tiene un avión concorde. Entonces el Presidente Miettarrand se levantó con su arrogancia paternalista, se apoyó sobre Sankara y dijo que le iba a dar un consejo sobre las relaciones internacionales. Más prepotencia, imposible.

 

Thomas Sankara, un buen comunicador

Thomas Sankara fue uno de los mejores oradores de los dirigentes del continente negro. A penas se le veía leyendo los discursos. Y casi siempre entusiasmaba a su público. Es fantástico ver a Sankara animando a los jefes de estados africanos a no pagar la deuda externa: "oye, el que quiera pagar, que coja su avión presidencial y se acerque al despacho del Banco Mundial para ingresar el dinero". Los jefes de estados africanos reunidos en Adis-Abeba (Etiopia) no sabían dónde meterse. Sus segundos aplaudieron con entusiasmo, sobre todo cuando Sankara reclamó dos versiones de la Biblia y del Corán, una versión para los ricos y una versión para los pobres: No puede haber una misma ética para los pobres y para los ricos. La Biblia o el Corán no pueden dirigirse en el mismo lenguaje a un explotador que a un explotado. Sería necesario dos versiones: una versión para los pobres y una versión para los ricos. 

Thomas Sankara y la igualdad de género

El joven Sankara promocionó la incorporación de la mujer en los puestos directivos y en el ejército, porque para él no había una diferencia de género sino de oportunidad. De modo que hombres y mujeres debían tener la misma oportunidad para todo. En el día mundial dedicado a la mujer (08 de marzo), obligó a todos los hombres a acudir al mercado para saber cuánto cuesta un kilo de arroz y cómo las mujeres se las ingenian para mantener a sus familias: los hombres se cabrearon, las mujeres disfrutaron.

Sentado en el público que se había reunido en la asamblea popular, Thomas Sankara confesó no entender por qué una estudiante embarazada tenía que abandonar sus estudios: “una estudiante que se queda embarazada se la expulsa del colegio. Pero nadie se molesta en saber si el chico que le ha embarazado no está, por casualidad, en la misma clase. De modo que el chico puede seguir “fabricando niños” hasta que termina sus estudios”. Esto no puede ser así. Como mínimo la chica embarazada tiene que tener la posibilidad de seguir con sus estudios. Por orden presidencial, las niñas embarazadas no debían abandonar sus estudios.

 Thomas Sankara y el desarrollo del país

Sankara quería un mercado africano para consumir lo que se produce en África y, en la medida de lo posible, no vivir de las deudas externas que no hacen más que hipotecar el futuro de los africanos. Los funcionarios debían vestir ropa fabricada por los artesanos de Burkina Faso para colaborar con la economía local.

Es divertido ver cómo Sankara discute con un adolescente que lleva una camisa con letras “Harvard”. El chico le acababa de preguntar al Presidente qué pensaba hacer para luchar contra el imperialismo: “¿Qué quieres que hagas? Tú llevas una camisa con la publicidad norteamericana. ¿Tú crees que no tenemos camisas fabricadas en nuestro país y que sean más bonitas que esa?”. El muchacho se quedó sin habla, que por otra parte es lógico: un adolescente discutiendo con un Presidente, Capitán del ejército, escoltado por sus guardaespaldas militares.

Sankara vendió los Mercedes de los antiguos dirigentes, quitó los choferes para las autoridades y prohibió a sus ministros viajar en primera clase porque no merece la pena gastar los fondos del pueblos por un vaso de champán (el avión despega a la misma hora y llega a la misma, estés o  no estés en primera clase).

La política de Sankara de “Une village, un bosque” (un pueblo, un bosque) permitió plantar millones de árboles para luchar contra la desertización del país.

Thomas Sankara, “El Che Guevara africano”

 

El Presidente Sankara decía la verdad (virtud vetada en la política servil) y no se comportaba como sus colegas africanos, auténticos caudillos y saqueadores de los fondos públicos. Sus políticas de consumir preferentemente los productos locales le enemistaron con las multinacionales, y desde luego no era bien visto por la administración francesa y norteamericana. Una vez catalogado como “comunista peligroso” por los gendarmes de la República, su muerte era cuestión de meses. Los ejecutores de las órdenes de arriba pensaron que descuartizando su cuerpo y enterrándole en una tumba anónima desaparecería el hombre y el mito. Y consiguieron que ocupara un lugar preferente entre los mártires del neocolonialismo occidental junto a Lumumba.
 
 

martes, 25 de junio de 2013

¿A quién beneficia la pobreza en África?


Todo el mundo medianamente formado puede contestar acertadamente a esta pregunta. No es difícil saber a quiénes benefician los conflictos armados en África, a qué país pertenecen las empresas multinacionales que están detrás de los señores de la guerra en Congo y a qué mercados internacionales acaba la materia prima saqueada en Sudán, Congo, Guinea Ecuatorial, Gabón o Angola. Todo el mundo sabe que los dos piratas somalíes encarcelados por la Audiencia Nacional no son los que estuvieron negociando el rescate de los españoles en Londres. Pero quien se pudre en la cárcel es el mismo, ayer y hoy: el pobre engañado por traficantes blancos y negros que viven lujosamente en Londres y se permiten contratar un bufete de abogados para negociar el rescate de los marineros españoles. Si no lo queremos ver no será por falta de datos.

 

La moda de los dirigentes africanos

Los dirigentes negroafricanos autonombrados democráticos han encontrado una nueva forma de perpetuarse en el poder a través de su prole. En Gabón, en 2009 Ali Bongo sucedió a su padre Omar Obongo (1967-2009) tras su fallecimiento en Barcelona. En Congo-Kinshasa, tras el asesinato de Laurent-Désiré Kabila (1997-2001), su hijo Joseph Kabila se coronó jefe de estado en 2001. Los medios de comunicación locales hablan de otros mandamases africanos que están empujando sus hijos hacia el sillón presidencial: Teodorín Obiang, vicepresidente de Guinea Ecuatorial, está esperando la muerte de su padre Teodoro Obiang Nguema (1979) para reemplazarle; José Eduardo do Santos (Angola, 1979) está preparando a su hijo José Filomeno de Sousa dos Santos para sucederle, igual que hace Yoweri Museveni (Uganda, 1986) con su hijo Muhoozi Kainerugaba, Paul Biya (Camerún, 1982) con su hijo Franck Biya o Paul Kagame (Rwanda, 1994) con su hijo Yvan Cyomoro. Le fils du président est, de fait, le président même. Mentalidad cancerígena que se está expandiendo en los palacios presidenciales africanos.

La perversión de la política occidental para África Negra

La política occidental para África Negra se sigue basando en dos principios básicos: “dividir para vencer” (principio heredado del colonialismo) y “la estabilidad de las instituciones estatales depende de un líder fuerte, independientemente de su ideología” (principio heredado del neocolonialismo). François Hollande y Barack Obama están intentando, con escaso éxito, imponer un criterio diferente: “la estabilidad de un país se debe a las instituciones estatales fuertes y duraderas, independientemente del dirigente de turno”. Tanzania, Ghana, Senegal, Kenia o Sudáfrica pueden ser ejemplos a seguir. No es casualidad que en su primer viaje a África Obama eligiera Ghana, y que en su segundo viaje eligiera Senegal, Tanzania y Sudáfrica (descarta visitar la tierra de su padre porque el actual presidente de Kenya está siendo investigado por crimen contra la humanidad por jueces y fiscales del lujoso, marioneta y parcial Tribunal Internacional de La Haya, según se desprende del libro de la antigua fiscal de dicho tribunal, Carla del Ponte).

 

“SOS, SOS, les voleurs de la République”

Alpha Blondy, cantante de Costa de Marfil, no cesa de denunciar los ladrones de la República que están en los palacios presidenciales. Afortunadamente no está solo en esta heroica tarea. Varias organizaciones internacionales se han propuesto llevar a los tribunales los bienes mal adquiridos por parte de los mandamases africanos y su entorno sanguijuela (Biens mal acquis). Los valientes jueces de Francia y  Bélgica han comenzado a poner freno a los bailes de mafiosos africanos que saquean las arcas de sus países para comprar coches de lujo y palacios en Occidente mientras los niños abandonan las escuelas por falta de becas.  El pueblo europeo debe saber que la connivencia de sus dirigentes con los ladrones africanos es, también, un crimen contra la humanidad. El pueblo europeo que adora los diamantes debe ser consciente que tal vez esa preciosa piedra lleva ingredientes de sangre de niños congoleños o liberianos. Nos guste o no, el saqueo del continente africano cuenta con la complicidad de los dirigentes occidentales, elegidos democráticamente. Y es vergonzoso.

lunes, 17 de junio de 2013

Homenaje al Capitán Mbaye Diagne

CAPITÁN MBAYE DIAGNE
Al día siguiente del atentado mortal de los Presidentes rwandés (Habyarimana) y burundés (Ntaryamira) en el avión Falcón-50, la Primera Ministra rwandesa (Uwilingiyimana) y su marido fueron asesinados en su refugio (en las instalaciones de la ONU protegidas por los famosos Cascos Azules) por los elementos de la Guardia Presidencial. Se sabe que los cinco hijos de la Primera Ministra fueron salvados de una muerte segura por un Casco Azul senegalés, el Capitán Mbaye Diagne (según cuenta su entonces jefe, el General canadiense Romeo Dallaire y numerosos testimonios). Tal vez éste fue el primer acto heroico del Capitán Mbaye, pero no fue el único. Tras esconder los hijos de la Primera Ministra en el Hotel de Mil Colinas, y más tarde conseguir evacuarlos a Suiza, Mbaye se dedicó a salvar la vida de los tutsi amenazados por los milicianos enloquecidos que no tenían más objetivo que ejecutar a quienes consideraban cómplices de los combatientes tutsi de FPR. Se habla de más de 600 vidas salvadas por el Capitán Mbaye.

El General Dallaire dice que Mbaye era el más fuerte de todos: «il était le plus courageux de tous». Por la noche, recorría las calles de Kigali rescatando civiles amenazados que llevaban al Estadio Amahoro (paz) bajo protección de los pocos Cascos Azules que quedaban en Rwanda. El 31 de mayo de 1994, cuando las matanzas se contaban por diez mil muertos al día, el Capitán Mbaye murió bajo los disparos de FPR, justamente cuando se encontraban en un check-point de los militares gubernamentales intentando negociar el intercambio de prisioneros, uno más de los que había conseguido. Irónicamente, el salvador de los civiles tutsi cayó bajo las balas de los combatientes tutsi, en su vehículo de los Cascos Azules. El especialista en las negociaciones desapareció en Rwanda, lejos de su tierra natal, abandonado por la Comunidad internacional, igual que todos los rwandeses.

Quienes conocieron al Capitán Mbaye sostienen que la comunidad internacional ignoró completamente la entrega heroica de este soldado senegalés simplemente porque no era blanco (según afirma el escritor Boubacar Boris Diop). «Comme le dit à juste titre le journaliste Mark Doyle, je n'ose imaginer ce que le monde aurait dit de lui si ce héros avait été blanc». En 2010, una asociación en su memoria fue fundada para que su memoria no fuera olvidada. Dirigida por su viuda Yacine Mar Diop, la Association du Capitaine Mbaye Diagne pour la Culture de la Paix, cuenta en sus miembros con los hijos del Capitán (Cheikh y Coumba), sus antiguos compañeros militares como el coronel Babacar Faye o Mark Doyle (periodista de la BBC que cubrió las matanzas).

En julio de 2010, su viuda y sus dos hijos recibieron la Medalla Umurinzi (protector) de manos del Presidente rwandés, que señaló que el pueblo rwandés estará siempre en deuda con el Capitán Mbaye por haber mostrado al mundo entero el sentido de Ubuntu africano: «Pour votre bravoure et votre sacrifice pendant le génocide du 1994, et pour montrer au monde la vraie signification de l’Ubuntu africain, le peuple rwandais vous sera toujours endetté». En 2011, en la conmemoración de 17 años del fracaso de la humanidad en Rwanda, la entonces Secretaria de Estado norteamericano, Hillary Clinton le rindió un homenaje póstumo (a pesar de que su marido, entonces Presidente de EE.UU, puso todo tipo de trabas para que la comunidad internacional interviniera en Rwanda).

Recordemos que las matanzas de más de un millón de rwandeses comenzaron con el atentado mortal del Presidente Habyarimana el día 6 de abril 1994, la ejecución de la Primera Ministra el día 7 de abril, la huida precipitada de 780 Cascos Azules belgas el 16 de abril (después de perder 10 de los suyos) y la resolución 912 del Consejo de Seguridad de la ONU que redujo vergonzosamente el número de los dichosos Cascos Azules (de 2500 a 270), abandonando así el pueblo rwandés en manos de los uniformados y milicianos con las ganas locas de matar. El éxito de la “solución final” es incuestionable: más de un millón de muertos en cien días, más de dos millones de refugiados rwandeses en los países limítrofes (Rwanda contaba con seis millones de habitantes) y un país reducido a escombros. La mayoría de los los rwandeses estamos vivos porque fuimos salvados por alguien, llámese el Capitán Mbaye o Paul Rusesabagina.

Algunas fuentes:
http://www.jeuneafrique.com/Article/ARTJAWEB20130614114231/senegal-tutsis-hutus-fprmbaye-ndiaye-le-heros-senegalais-du-genocide-rwandais.html

https://www.facebook.com/pages/Association-du-Capitaine-Mbaye-Diagne-Nekkinu-J%C3%A0mm/193623944006365

http://www.rnanews.com/grandslacs-sante/4947-les-etats-unis-honorent-un-capitaine-senegalais-qui-a-sauve-600-tutsi-

http://www.pbs.org/wgbh/pages/frontline/shows/ghosts/video/capt.html

sábado, 4 de mayo de 2013

Algunas mujeres africanas en las altas instituciones de sus países

Presidenta de Liberia

Existe una idea generalizada en España de que el varón africano es un vago que pasa la vida de bar en bar, o de mujer a mujer en caso de ser polígamo. Bastantes personas, incluso aquellas que se les supone una cultura general más alta, me siguen interrogando sobre el tema: “Las mujeres africanas trabajan más que vosotros, ¿no?”.  Y añaden: “Si la economía africana estuviera en manos de las mujeres no habría tanta pobreza”. Yo no soy tan estúpido como para negar estas afirmaciones sin más. Pero creo que hay afirmaciones que necesitan matices porque el que no distingue, a demás de confundir, puede equivocarse.


Presidenta de Malawi
 

En las siguientes entradas seguiré reflexionando sobre la temática de la mujer negroafricana, marginada por ser mujer y por ser negra. Creo que las cosas empiezan a cambiar. Es cierto que en España no se visualiza la mujer negra en los medios de comunicación, en las series de televisión, en los partidos políticos o en los sindicatos (creo que hay mujeres negroafricanas capaces de dar la talla en estos ámbitos. La Asociación KARIBU (amigos del pueblo africano) puede facilitar nombres a quien quiera incorporar una mujer a estos ámbitos. (Cfr. http://www.asociacionkaribu.org/).

En esta entrada quisiera homenajear a nuestras mujeres africanas que dirigen sus países (Liberia y Malawi) o que han dirigido los gobiernos de sus países como Primeras Ministras. Seguramente que no tengo todos los datos. Agradeceré cualquier tipo de aportación en este campo para actualizar mis datos.
A.- Dos Presidentas negroafricanas
1)-2005: Ellen Johnson-Searleaf: Presidenta de Liberia. Reelegida en 2011.
2)-07 de abril de 2012: Joyce Banda, Vicepresidenta de Malawi (2009-2011), ocupa el cargo de Presidenta tras el fallecimiento del Presidente Mutharika.

B.-Varias Primeras Ministras negroafricanas
1.-Enero 1975: Elizabeth Domitien: Primera Ministra de África Central, nombrada por el Presidente Jean-Bédel Bokassa. Dimitió en 1976 al rechazar que Bokassa se autoproclamara emperador.
 
2.-1994-2003: Specioza Kazibwe: Vicepresidenta en Uganda bajo la presidencia de Museveni.
 
4.-3 Marzo 2001-4 Noviembre 2002: Mame Madior Boye: Primera Ministra en Senegal bajo la presidencia de Abdoulaye Wade.
 
5.-13 julio 1993-7 abril 1994: Madame Agathe Uwilingiyimana,  Primera Ministra en Rwanda. Nombrada por el Presidente Habyarimana. Asesinada el 7 de abril 1994, supuestamente bajo protección de los cascos azules.
 
6.-10 de julio 1993 al 11 de febrero 1994: Sylvie Kinigi, Primera Ministra en Burundi, nombrada por el primer Presidente elegido democráticamente y asesinado por los extremistas tutsi, Melchior Ndadaye (hutu, asesinado con seis ministros el 21 de octubre 1993). Ella, tutsi, salvó su vida al refugiarse en la embajada francesa.
7.-17 de febrero 2004-16 de enero 2010: Luisa Diogo: Primera Ministra de Mozambique con los presidentes Joaquin Chissano (1986-2005) y Armando Guebuza (desde 2005).
 
8.-6 diciembre 2004- marzo 2008: Joyce Mujuru. Vicepresidenta en Zimbabwe bajo la presidencia de Robert Mugabe.

9.-22 junio 2005-24 septiembre 2008: Phumzile Mlambo-Ngcuka: vicepresidenta de Sudáfrica bajo las órdenes del Presidente Jacob Zuma.
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Cecile Kyenge, ministra de Integración de Italia "Yo no soy de color, soy negra":
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/internacional/2013/05/03/cecile-kyenge-ministra-integracion-italia-color-negra/00031367606852677666334.htm
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viernes, 1 de marzo de 2013

Desde mi patera:


Todo suena romántico. Desde mi patera contemplo las ondas marinas, el espacio abierto que puede ser mi tumba o mi salvación. Vivir es montar en una patera, luchar contra mareas y vientos, remar mar a dentro y unir las dos orillas: África y Europa, el hambre y la abundancia. Es verdad. La vida es una inmigración, un ir y venir, un estar ajustando las piezas y sintonizando las emisoras para alcanzar una buena comunicación. Todos somos inmigrantes. ¿Quién vive en la casa en la que nació, en el pueblo que le vio crecer, en la ciudad donde estudió, en el lugar donde se enamoró de su primer amor? Todos estamos montados en una patera.
 
Todo suena triste. Desde mi patera contemplo la realidad que deseo pero que nunca podré alcanzar. He salido de mi país huyendo de la guerra, del hambre y de una sociedad que no me ofrecía futuro alguno. Allí era un legal condenado a la muerte. Aquí me llaman un ilegal. Pero yo me pregunto: ¿desde cuándo uno nace ilegal? Del matrimonio ilegítimo hemos pasado a la existencia ilegal. Pronto tendremos también una muerte ilegal. Propongo un monumento para quien convirtió los seres humanos en ilegales.
 
Todo suena problemático. Desde mi patera oigo hablar de mí, unos para explotarme, otros para salvarme. Lo mismo me da que me llamen Indocumentado, o sencillamente Ilegal. Sólo busco un lugar donde vivir dignamente. Yo no soy aventurero; invierto lo poco que tengo para buscar la suerte y salvar mi pellejo. El camino al exilio es fruto de falta de expectativas y de oportunidades para sentirme persona humana en mi pueblo de origen. A donde me dirijo hay una nevera llena de alimentos, y unos yogures a punto de caducar. Dios mediante, habrá quien me ofrezca unas pocas migajas que tenga sabor a pan, o una aspirina a punto de caducar. Ya sé que para algunos yo también soy una mercancía caducada. Pero otros saben que me empuja la miseria, que me atrae el paraíso y que me mata el muro visible que me impide el paso.
 
Todo suena africano. Desde mi patera sólo me muestran los inmigrantes africanos. ¡Qué pena! Según los medios de comunicación, el nuevo rostro del inmigrante se llama africano, aunque sea minoritario en España.  ¿Acaso ve usted patera de ucranianos, de cubanos o de alemanes entrando en España? Pero sólo el 25% de inmigrantes proceden de África. Definitivamente soy una pelota entre los políticos, un titular en los medios de comunicación social y una curiosa foto para los coleccionistas. Hablan de los que llegan, pero ignoran los que atrapa el mar, o los que vienen detrás.
 
Todo suena patético. Desde mi patera contemplo una multitud de pateras que me siguen. Todos queremos pisar tierra firme, descansar de nuestro largo viaje e intentar ser feliz. La procedencia y el modo de nuestra entrada no deberían influir en el modo de ayudarnos, porque sencillamente somos humanos y buscamos lo mismo que usted: vivir dignamente, o lo mínimo: sobrevivir. El mundo está francamente mal dividido: el 20% consume el 80% de los bienes terrestres, que deberían ser un almuerzo compartido. El mundo rico no es un hogar para los inmigrantes: es una prueba constante de su identidad. Claro que el inmigrante no tiene identidad, la busca. Y si usted no le presta la antorcha para encontrarla, le está anulando. Pero yo le comprendo: le bombardean con titulares para que se convierta en un cobarde y luche contra su propia historia de la inmigración. “Vienen los inmigrantes” -le dicen o le escriben-, “llega una avalancha de inmigrantes”, “invaden nuestras playas”, “nos quitan el trabajo”, “hacen peligrar nuestra raza y nuestra religión”, "se enamoran de nuestras hijas",... son amenazas constantes que llaman a su casa y le aconsejan blindar la puerta principal de su corazón. Hay una incitación al odio racial desde la política, el Internet, la música y las revistas. Humanamente creo que hay lenguaje que no se puede tolerar y actitudes que merecen matices. Pero la realidad es que puede crecer el racismo y la xenofobia en España. Estas actitudes nos colocan en una situación de precariedad y de angustia permanente. Destruyen nuestras costumbres, marginan las parejas mixtas, acallan a los hombres y mujeres de buena voluntad. Asocian nuestra imagen a la droga, al robo, a la marginación, a la miseria. Y la miseria no es humana, lo sabemos todos. Callan nuestra aportación al desarrollo económico, a la riqueza intercultural, a nuestra propia historia, a la reinversión en nuestros países de origen. No quieren reconocer que acoger a un africano es un deber de justicia a quien padeció y sigue padeciendo la esclavitud, el colonialismo y la globalización occidental.
 
Todo suena humanitario. Desde mi patera espero un Karibu, un simple “bienvenido”. No quisiera “circular sin billete” porque me han pagado el viaje de retorno, ni quisiera saltar las barreras del Metro Madrid para llegar al lejano comedor que me han asignado. Soy una persona que busca un nuevo hogar para vivir. Me pesa lo que dejé atrás, por favor no me aumente la carga. No quiero “un discurso políticamente correcto” que esconda un comportamiento racista y limite mi crecimiento humano. Vengo buscando la subsistencia; necesito protección, afecto, entendimiento; ofrezco mi historia personal, mi participación en el desarrollo social, mis inquietudes. Esto es lo único que tengo. Estoy convencido de que al coincidir dos personas distintas, si se respetan y conviven, con el tiempo, ambas cambian y se enriquecen mutuamente. Por eso integración no quiere decir una simple adaptación que anula la identidad del otro, sino un encuentro creativo entre dos amigos, un mirar en la misma dirección sin confundir los horizontes personales. Por eso en la hospitalidad para con los inmigrantes la Ley no es lo más importante. La Ley es un instrumento. Lo que resuelve los problemas de integración es la voluntad de que el otro viva y tenga mil oportunidades para reencontrarse como persona.
 

Escrito el 5 de noviembre 2000

miércoles, 20 de febrero de 2013

La diáspora negroafricana

Dibujo de Nicole, enero 2013
Hasta la década de los sesenta, los pocos negroafricanos que salían de su continente si no eran diplomáticos, eran estudiantes. Y no se planteaban quedarse a vivir en Occidente. Mama África estaba descubriendo el camino de la democracia y necesitaba que todos sus hijos estuvieran a su lado para ayudarle en la construcción de su pueblo. El mismo padre del presidente norteamericano no quiso quedarse en EE.UU tras terminar sus estudios y volvió a su Kenya natal para colaborar en su desarrollo económico.
 
Desgraciadamente, la independencia de África Negra terminó en regímenes dictatoriales que sólo saben oprimir a su pueblo. El saqueo incontrolado de las riquezas de Mama África encontró protección ilegal en los distintos grupos armados que aprovechan cualquier grieta para dinamitar la paz social y provocar el sufrimiento a muchos pueblos negroafricanos. Solución: o morir de un balazo, o morir de hambre, o morir en el Estrecho. Si bien el camino al exilio puede acabar en la muerte, a veces es la mejor opción. Por eso muchos hijos de Mama África estamos dispersados en los distintos continentes, ninguneados por los chulos de nuestra Mama África. Aunque somos de una misma madre, cada uno es hijo de su padre:
 
a)     Los negroafricanos que, habiendo nacido en África, por motivos laborales o diplomáticos se encuentran viviendo fuera de su tierra, pero con la intención de volver en cuanto se pueda.
b)    Los negroafricanos que, habiendo nacido en África, por motivos bélicos o económicos se han visto en la obligación de coger el camino de la inmigración, con todo el dolor a cuesta, con facturas sin fortuna.
c)     Los hijos de los negroafricanos que nacen en el país de la inmigración y se educan según los valores del país en el que residen, y que prácticamente no conocen nada del país de sus padres.
d)    Los hijos de los negroafricanos que fueron arrancados de su contiente en los siglos pasados y fueron convertidos en esclavos por árabes y occidentales.
Todos nosotros necesitamos un pasaporte afro para volver a los brazos de nuestra Mama África.

miércoles, 13 de febrero de 2013

El tráfico de esclavos negroafricanos

El historiador francés, Jean-Michel Deveaux sostiene que “la esclavitud de negros constituye una de las tragedias más grandes en la historia de la humanidad en términos de su escala y duración”. Este crimen legitimado intelectualmente a través del llamado “Código negro” duró 13 siglos y produjo muchas víctimas. Entre 1500 y 1850, según la UNESCO, las víctimas superaron 12 millones. El resultado fue la devastación del continente africano donde se abandonó la agricultura y se detuvo el progreso de regiones enteras al despoblarse de hombres y mujeres en edad productiva. En este siglo 21, la postura occidental hacia la “trata de negros” o “tráfico de esclavos negros” ha cambiado sensiblemente.
El 12 de octubre de 2012, el Presidente francés, François Hollande, visitó el museo de los esclavos en la isla de Gorée (Senegal) y dejó sus deseos en el libro de visitas:
«Au nom du peuple français, je rends hommage à la mémoire des innombrables victimes d’esclavage. Le rappel de cette tragédie lie à jamais l’Europe, l’Afrique, l’Amérique et les Caraïbes. Il nous oblige à lutter sans relâche contre toutes les formes de l’exploitation de l’être humain».
Muchos africanos interpretamos esta visita del Presidente francés a la “Maison des esclaves de l’île de Gorée” como una forma de pedir disculpas por la responsabilidad francesa en el tráfico y comercio de los negroafricanos en los siglos pasados.
Durante mucho tiempo, los dirigentes africanos se quejaban de que los europeos no pedían perdón por el crimen de la esclavitud de los negroafricanos (no olvidar nunca que el comercio de los esclavos negroafricanos fue inaugurado por los árabes). Pero los mismos dirigentes africanos no hacen nada para mantener viva la memoria de sus hijos que fueron comprados como ganado y llevados violentamente para trabajar en las plantaciones americanas como esclavos. Que los árabes o los europeos hicieran lo que hicieron puede entenderse por su falta de humanidad y por su amor enfermizo al capital. Pero que los mismos negroafricanos atraparan y vendieran a sus propios hijos, o que no hicieran nada para impedir su rapto, es una auténtica vergüenza para todos nosotros que tenemos piel negra. Por eso creo que nuestros dirigentes africanos deberían pedir perdón a sus hijos afros diseminados por todo el mundo por lo mal que han tratado y siguen tratando a sus hijos.
Personalmente creo que la Unión Africana, si quiere que la diáspora africana participe en la construcción de África debe lanzar algunas iniciativas reparadoras, incluidas las siguientes:
1.-Fomentar el estudio de la historia de África y de los Afros a través de las publicaciones y conferencias continentales e internacionales;
2.-Fomentar el turismo afro a través de un pasaporte afro válido para todos los países africanos, para que cualquier afro, esté donde esté, pueda visitar gustosamente nuestro continente y visitar el lugar de sus antepasados;
3.-Fomentar el estudio de las lenguas extranjeras en África, principalmente lenguas hablados por los afros: inglés, castellano y francés. El estudio del castellano en África debe ser una urgencia, no solo porque nos conecta con muchos afro hispano-hablantes, sino que hay todo un continente económica que ofrecer una posibilidad creativa para África. Incluso algunas lenguas africanas como Swahili pueden ofrecerse a los afros que tengan el deseo de estudiar la lengua de sus antepasados.