Albert
Camus comienza su libro (El mito de Sísifo)
afirmando acertadamente que “juzgar que la vida vale o no la pena de ser vivida
equivale a responder a la cuestión fundamental de la filosofía”. Casi siempre
que solicito una impresión personal acerca de esta afirmación, quienes se
encuentran en mi círculo de relaciones reaccionan con rechazo diciendo que no
están de acuerdo porque la vida es maravillosa y siempre merece ser vivida.
Cuando profundizamos más en nuestra conversación vemos que en ningún momento
ellos se han interrogado serenamente sobre el sentido de la vida. Les recuerdo
la posibilidad y la crudeza de la muerte.
Coincidimos con la sabiduría popular que dice que los muertos descansan en paz. Aceptamos que el mero hecho de contemplar la posibilidad de la muerte como un descanso eterno redimensiona el sentido de la vida (el que asiste serenamente al moribundo le cierra los ojos mientras susurra el “descanse en paz”). La muerte, o sea, el descansar en paz se convierte en un deseo, una oración, un consuelo. Pero no deja de ser frustrante que no podamos oír y agradecer los mejores deseos de nuestros seres queridos. Cuando los vivos sueltan el “descanse en paz” se rebelan, consciente o inconscientemente, contra la vida terrenal y ponen toda su esperanza en la muerte. Tal vez por eso los cristianos profesan que la muerte es redentora. Posiblemente sea la mejor forma que tenemos para reconocer la fragilidad de esta vida caduca
http://www.arretetonchar.fr/albert-camus-le-mythe-de-sisyphe-andr%C3%A9-comte-sponville/
Coincidimos con la sabiduría popular que dice que los muertos descansan en paz. Aceptamos que el mero hecho de contemplar la posibilidad de la muerte como un descanso eterno redimensiona el sentido de la vida (el que asiste serenamente al moribundo le cierra los ojos mientras susurra el “descanse en paz”). La muerte, o sea, el descansar en paz se convierte en un deseo, una oración, un consuelo. Pero no deja de ser frustrante que no podamos oír y agradecer los mejores deseos de nuestros seres queridos. Cuando los vivos sueltan el “descanse en paz” se rebelan, consciente o inconscientemente, contra la vida terrenal y ponen toda su esperanza en la muerte. Tal vez por eso los cristianos profesan que la muerte es redentora. Posiblemente sea la mejor forma que tenemos para reconocer la fragilidad de esta vida caduca
http://www.arretetonchar.fr/albert-camus-le-mythe-de-sisyphe-andr%C3%A9-comte-sponville/
1 comentario:
Por que no:)
Publicar un comentario