martes, 13 de enero de 2015

Os doy mi memoria


No sé por dónde empezar
porque no canto victoria
ni prometo justicia.
Poder no tengo
propaganda no quiero.
Vuestra muerte es indolente
porque ya sé dónde nacisteis.
De ironía estoy, ya lo sabéis.
De quejarme no iría a la orilla del mar
desde donde me alcanzan vuestras voces
pidiendo auxilio.
Hablo de vosotros que cruzasteis El Estrecho
buscando refugio,
vosotros que nunca tuvisteis consuelo
en las aguas turbulentas.
Gente con facturas sin fortuna
que anhelando memoria salisteis
en las contraportadas.
Creedme, ya nada nuestro
merece vuestra estima.
Construimos un mundo indomable
y morimos sin méritos:
os doy mi memoria.

 

 

ã Elie

jueves, 1 de enero de 2015

Groserías para empezar el año 2015

Me puedes llamar negro porque soy negro como tú. Me puedes llamar africano porque soy africano como tú. Y me puedes llamar hermano porque compartimos el mismo antepasado.
Sé que te interesan los acontecimientos políticos de tu tierra natal y sé que te repugnan la mayoría de los dirigentes negros que no son más que sanguijuelas. Pocos son democráticos. Bastante son auténticos criminales de guerras. Muchos son dictadores que ganan las elecciones con más del 90% del voto emitido.
Estoy seguro de que tú y yo coincidiríamos en la elaboración de los dirigentes africanos que son corruptos y que amasan fortuna en los bancos occidentales. Independientemente de que tú y yo sepamos que realmente quienes se benefician de la miseria de los negros son políticos y empresarios occidentales, ¿no crees que tu falta de compromiso político da pena, hermano?
A ver: negro, africano o hermano (porque no te molesta que te llame así, ¿no?: ¿no te da vergüenza compartir los mismos principios religiosos que los dirigentes marroquíes que te están machacando en las fronteras con España y que han construido una valla con cuchillas para que te mueras desangrado como una bestia? ¿De verdad puedes rezar el mismo Dios católico que los dirigentes españoles que te encierran en el CIE de Aluche? ¿Sabes que te tratan peor que a un animal? Digo yo que eres consciente de tu status infra-animal para algunos europeos. ¿O necesitas pruebas?
Espero que cuando vuelvas a tu país natal después de pasar por el lujoso Hotel de Aluche (CIE) cambies de actitud y pidas a tu Presidente que cancele los contratos millonarios que tiene con las empresas marroquíes y francesas, por ejemplo. Supongo que sabes que el gas que calienta solo el cuarto de quienes te vigilan procede de….Piensa un poco, joder. Y sobre todo defiéndete. Te morirás igual pero serás un Thomas Sankara.
Oye, hermano, ¿sabes quiénes explotan las riquezas de tu pueblo y te obligan a bajar de la valla de Melilla a golpazos? ¿Sí o no? ¿Y qué haces para cambiar la situación. “Lo mismo que tú, negro”, me contestaras. “Nada”. No me extraña que todo el mundo se ría de ti, negro. En el fondo te lo mereces. ¿Qué has hecho para que merezcas ser tenido en cuenta? ¿Portarte bien? Venga, ya: el mito del negro bueno pertenece a la generación de nuestros abuelos y padres que no tuvieron huevos para enfrentarse a la esclavitud, a la colonización y a la invasión político-religiosa.
A ver, negro: antes de que llegaran los musulmanes y cristianos a tus aldeas natales, ¿en qué Dios creían tus antepasados? ¿Por qué cojones no eres capaz de defender ese imaginario que fue borrado injustamente por árabes y occidentales? Te enorgullece el hecho de que puedas hablar francés o inglés y no te vergüenza que apenas sepas escribir en tu lengua materna. ¿Sabes qué? No me das pena. Te sientas en el primer banco de la catedral, incluso celebras Misa en templos lujosos pero no te preocupas por las creencias de nuestros antepasados para ver si son mejores que las que te impusieron.
Oye, africano, ¿de verdad crees que mereces ser tratado de igual a igual con un marroquí o un blanco? Anda ya, no me hagas troncharme de risa. Si ni siquiera sabes de dónde vienes ni en qué creer. Si sólo sabes decir “Ndiyo bwana” a todo (sí, señor). No me extraña que te traten peor que a un perro porque por lo menos el perro sabe proteger su entorno. ¿No crees que deberías empezara rebelarte contra las distintas intoxicaciones que te han ido metiendo en tu cabeza, hermano? ¿De verdad vas a seguir creyendo en el mismo Dios que tus maltratadores? Haz lo que te dé la real gana, pero no me sigas llorando.
Sé que te acuerdas de lo que decían los colonizadores hace bien poco (y algunos lo siguen pensando en “pétit comité”): que tú eres un niño grande al que hay que enseñar el camino y que tú no eres capaz de tomar ninguna iniciativa. ¿Verdad o mentira? Pues demuéstralo, maldita sea.
Negro, África te necesita. Nuestros hermanos que se están muriendo de hambre mientras las empresas francesas se llevan el café y el cacao a precio de risa nos piden voz. Habla, joder. ¿No presumes de hablar bien inglés o francés? Nuestros hermanos pequeños van al frente a defender el dictador de turno y mueren de un balazo mientras la mujer del dictador y su retoño están de “week-end de compras” en Londres.
Por amor de Dios, tú que cantas y bailas con la música de Bob Marley, emancípate y únete al grupo para que entonemos la canción de la redención. Sé que sientes veneración por Nelson Mandela. Pero la figura que más necesitamos es un Thomas Sankara. Medita un poco sobre su vida y comprenderás mi cabreo, mi grosería y mi generalización. Naciste negro, vives negro y morirás negro: pero si quieres ser útil a la comunidad negra, piensa como un blanco. Acuérdate de las sabias palabras de Thomas Sankara:
“No puede haber una misma ética para los pobres y para los ricos. La Biblia o el Corán no pueden dirigirse en el mismo lenguaje a un explotador que a un explotado. Sería necesario dos versiones: una versión para los pobres y una versión para los ricos. 
Venga, pues. Canta conmigo la canción de la redención de nuestro ídolo Bob Marley y pide perdón en nombre de nuestros abuelos que no se opusieron a la esclavitud. Pide perdón en nombre de nuestros dirigentes africanos que no se acuerdan de millones de hijos de África que viven en el continente americano. Yo te pido perdón si te he ofendido. Y pido perdón al que no haya entendido mi ironía. Tú y yo sabemos que si los negros sobreviven en este mundo capitalista es porque algunos blancos nos quieren y nos ayudan en todo. Por supuesto que te mandaré al infierno si me entero de que odias a los demás seres humanos. Canta conmigo, pues:


 

 

 

Redemption Song (Bob Marley)

“Old pirates, yes, they rob
I Sold I to the merchant ships
Minutes after they took I
From the bottomless pit
But my hand was made strong
By the hand of the almighty
We forward in this generation
Triumphantly

Won't you help to sing
These songs of freedom?
'Cause all I ever have
Redemption songs
Redemption songs

Emancipate yourselves from mental slavery
None but ourselves can free our minds
Have no fear for atomic energy
'Cause none of them can stop the time

How long shall they kill our prophets
While we stand aside and look?
Ooh Some say it's just a part of it
We've got to fullfil the book

Won't you help to sing
These songs of freedom?
'Cause all I ever have
Redemption songs
Redemption songs
Redemption songs

Emancipate yourselves from mental slavery
None but ourselves can free our mind
Woh, have no fear for atomic energy
'Cause none of them-a can-a stop-a the time

How long shall they kill our prophets
While we stand aside and look?
Yes, some say it's just a part of it
We've got to fullfill the book

Won't you help to sing
These songs of freedom?
'Cause all I ever had
Redemption songs

All I ever had
Redemption songs
These songs of freedom
Songs of freedom”

sábado, 20 de diciembre de 2014

Mi pasaporte


Mi pasaporte son los besos de una mujer
reconstruyendo mi pasado;
mi locura, el amor prohibido
en los lugares místicos;
mi sueño, el secreto de mis amantes.

 
Cruzaste los mares sin pensarlo,
ganaste las batallas sin trampas
y yo te soñé tanto que te hice real;
así, has vuelto donde fuiste mujer
y me has recordado que te sigo amando.

 
Ahora que el tiempo está de nuestra parte
revélame los secretos de antaño,
las riberas que no pude averiguar
lo que vi y sigo imaginando
el coto privado de los amantes.

 
¿Verdad que vivir soñando nuestra historia
es recordar que los amores tardíos
apenas regresan a sus comarcas?
Cuando ya no te alcancen mis besos
convéncete que todo acaba llegando:
el hombre que amaste es tan real como tú.

 

 
ã Elie, 2014

domingo, 14 de diciembre de 2014

Groserías para terminar este año 2014


Imagen que circula por Twitter
El españolito termina el año 2014 tal como lo empezó: pegado al televisor, echando pestes por su boca cada vez que sale un político, pero entregando su voto al que le está hundiendo en la miseria. Siempre que haya futbol y Jorge Javier siga con su programa en Telecinco, todo va bien. Al españolito le trae sin cuidado cuánto gana Mariano Rajoy o Pedro Sánchez: sólo quiere saber qué tipo de braguitas llevó Isabel Pantoja cuando entró en la cárcel (con todos mis respetos hacia Isabel Pantoja y sus bragas). De modo que el españolito acaba el año tal como lo empezó: dejándosela meter doblada.

Los más afortunados terminan este año 2014 cómo lo empezaron: sólo pagando las facturas mensuales. Para los asalariados, es muy probable que el espejismo de los brotes verdes les haya empujado a darse unos pocos caprichos para que el agobio en el curro tenga, al menos, un sentido. Incluso algunos siguen pagando los caprichos de los futbolistas millonarios que no saben qué hacer con la pasta. No deja de ser curioso que un mileurista les pague caprichos a un Messi o a un Ronaldo. Será, tal vez, que el ocio es terapéutico para el españolito de a pié.

Los que saben trincar siguen trincando y no pisan la cárcel. Los más listos del reino se suben el sueldo mientras nos lo rebajan a nosotros (el gobernador del Banco de España, por ejemplo). Incluso he oído a ministros indignados porque el presidente del gobierno cobra menos que sus secretarios. ¡Habráse visto! Hay quienes tienen tres sueldos pagados por los ciudadanos, y les parece que siguen cobrando poco mientras se resisten a abrir los comedores sociales para los niños malnutridos. Esta es nuestra España actual: no me extraña que algunos catalanes se quieran pirar porque el cachondeo de nuestros políticos merece un monumento. Dicen que la crisis es cosa del pasado, cuando el españolito las siguen pasando putas para llegar al final del mes. Pero este mismo españolito se lo merece porque sale a aplaudir cada vez que el político de turno vomita una ocurrencia. Incluso a veces castiga al profesor que defraudó administrativamente unos diez mil euros mientras aplaude al millonariamente indemnizado por hundir Caja Madrid.

Españolito, sigue entretenido con el futbol y con Sálvame y verás cómo el año que viene vas a tragar todo lo que te metan en la boca: llegan las elecciones generales y tu voto es tu condena. Yo te entiendo. Pensarás que más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer: así te enseñaron los señoritos para cortarte las alas, para que te conformes con lo que tienes, para que agarres un solo palomo mientras los 99 cagan sobre tu cabeza. Debería soltar esa triste paloma y perseguir a los que están volando como hacen los más listos del reino. Porque, en cualquier caso, ¿a estas alturas tienes algo qué perder? No entregues tu trasero, digo tu voto, sin antes cobrar. Si bien sabes que las promesas de tu ex pareja ahora mantienen las ilusiones de tu compadre, ¿con qué ingenuidad te tragas las promesas del que te está ahogando en tus propios vómitos? Vamos, hombre. Deja de echar pestes delante del televisor y sale a la puta calle para despedir a quienes te están chupando la poca sangre que te queda.

sábado, 6 de diciembre de 2014

El silencio de Rajoy


Imagen enviada por Whatsapp
1.-El gobierno de Mariano Rajoy ha ido desmontando, poco a poco, los pilares del estado del bienestar que teníamos en España: sanidad pública, enseñanza pública, justicia para todos, libertad de manifestación sin acoso policial, televisión pública, etc. Lo miremos por donde lo miremos, el estado del bienestar no es más que algo residual que será totalmente aniquilado si Mariano Rajoy sale reelegido. Tal vez es lo que quiere el españolito. Si es así, bendita sea la llegada de Rajoy.

 2.-Muchos españoles desconocen qué piensa su presidente sobre los grandes temas sociales: ecología, aborto, terrorismo internacional, inmigración, dependencia, educación, sanidad, discapacidad, seguridad ciudadana, independencia territorial, corrupción, etc. Sí que sabemos que con su “ley mordaza” nos ha restringido derechos a la libre manifestación y la intimidad individual ya no existe: “papa-estado quiere saberlo todo de nosotros”. ¿Cómo? Utilizando el CNI para espiarnos; acudiendo a la policía nacional para aplastar las manifestaciones a través de múltiples expedientes sancionadores; utilizando a los fiscales para pedir penas descomunales; “puteando” a los jueces que no ejecuten el seguidismo; obligando a los fiscales a presentar querellas sin fundamentos jurídicos.

3.- Como jefe de un ejecutivo, el presidente Rajoy tiene un perfil mediocre. No es comparable a un Felipe González, ni a un José María Aznar, ni siquiera a un José Luis Zapatero que fue fulminado por la crisis económica. Los ministros de Rajoy, a excepción de los salpicados por los escándalos de corrupción, no tienen rostro. Incluso el mediático Wert está desaparecido. Yo no soy capaz de reconocer a varios ministros por la calle, a pesar de que yo soy consumidor habitual de los medios de comunicación. Aunque reconociera a Ana Pastor o a Montoro, no sería por formar parte del gobierno Rajoy, sino más bien en referencia al gobierno de José María Aznar. Francamente no sé si Rajoy tendrá valor para presentarse otra vez a las elecciones legislativas. Pero si lo hace y sale reelegido, muchos pediremos un monumento para el masoquismo del españolito.

4.-Todos los planes político-económicos del presidente Rajoy para sacarnos de la crisis económica han sido un fiasco. Probablemente pensó, ingenuamente, que rescatando cajas de ahorro, bancos y grandes empresas recibiría, a cambio, la creación de puestos de empleos para bajar el alto índice de paro en nuestro país. Las cajas de ahorro, bancos y grandes empresas aprovecharon la inyección millonaria para indemnizar millonariamente a sus ejecutivos, y con el resto, taparon sus socavones. Pero no crearon ningún puesto de empleo. Más bien cerraron las oficinas, y aprovecharon la reforma laboral para despedir a más empleados pero con una indemnización miserable. O sea, lo de siempre: los arriban han salido ganando a costa de la caja común.

jueves, 27 de noviembre de 2014

Tres años con el Presidente Mariano Rajoy

El panorama político-económico español no es actualmente más esperanzador que cuando el presidente Rajoy ganó las elecciones generales en 2011. Reconozco que el presidente Rajoy improvisa menos que Zapatero, sobre todo desde que mandó callar a sus ministros. Ya no tenemos las perlas de Fátima, Wert, Gallardón o Mato que se enteraba de los casos del Ébola en España a través de los medios de comunicación.
Las cajas de ahorro que estaban en bancarrota fueron rescatadas por el dinero público y los resultados macroeconómicos parecen estar en positivo. Las empresas que ayer despedían parte de su personal han decidido aumentarles el sueldo a sus ejecutivos mientras negocian la bajada del sueldo a quienes se salvaron de los famosos ERE. Aunque las manifestaciones populares son prácticamente inexistentes, motivos no faltan. Los desahucios siguen aumentando. Es más: creo que nos hemos acostumbrado a que nos la metan doblada: los inmigrantes que perdieron sus derechos sanitarios no dicen nada; los estudiantes que pagan más becas sólo piensan en salir de España; los jueces que criticaron las tasas del ministro Gallardón las están aplicando; los sanitarios que se enfrentaron a la desgraciada ministra Ana Mato (desgraciada porque ha sido destituida) se van incorporando a los hospitales privatizados; en fin… cada vez el gobierno de Rajoy nos cobran más por unos servicios vergonzosos. Y la corrupción ha sido elevada a la categoría de “marca España” porque afecta a empresarios, políticos y familia real. Da la sensación de que estamos en la jungla, y que el que no trinca es un imbécil.

domingo, 16 de noviembre de 2014

¿Mismos perros con los mismos collares?

Uno de los ideólogos de la derecha norteamericana, el catedrático Francis Fukuyama, sostiene que la historia de la humanidad ha llegado a su fin porque la caída del comunismo y el triunfo mundial del liberalismo político y de la economía del mercado han traído como consecuencia el que ya no exista espacio para nuevas grandes batallas ideológicas. Esto se evidencia en el colapso y agotamiento de ideologías alternativas a la democracia liberal occidental. No hay luchas en torno a grandes asuntos, y en consecuencia, no se necesitamos de generales ni estadísticas: sólo nos queda la actividad económica. Incluso las élites de la supuesta China comunista son más capitalistas que los ejecutivos de Wall Street. Los mismos chinos que tienen sus tiendas en nuestros barrios viven sólo para la producción del capital.
 
Partidos políticos
Nos guste o no la tesis principal de Fukuyama, la realidad es que hoy por hoy no hay ningún sistema consistente que pueda competir con el capitalismo. Los militantes socialistas son igual de capitalistas que los militantes liberales. En España, por ejemplo, es muy difícil distinguir un socialista de un conservador popular: visten la misma marca de ropa, frecuentan los mismos bares, compran en los mismos grandes almacenes y hasta ven los mismos programas televisivos. Lleven coleta o barba, cuando alcanzan el poder, hacen la misma política: rescatar bancos y huir de los empobrecidos. El mismísimo Felipe González ha estado cobrando de los grandes multinacionales, igual que José María Aznar. Personalmente no logro encontrar diferencia entre ambos dirigentes.
 
La prensa española
Me da la sensación de que solamente la Cadena Ser intenta mantener su línea editorial y sus periodistas principales se indignan por aquello que nos indignan a todos. Pero francamente yo no veo diferencias entre El País, El Mundo y La Razón. Los editoriales del periódico El País no difieren de su competidor, La razón: defienden lo mismo y casi con el mismo ímpetu de independencia que, todo el mundo sabe que es pura mentira porque el capital de ambos periódicos provienen del mismo caballero que controla El mundo. ¿Qué diferencia hay entre Antena 3 y Telecinco? Veo señores y señoras contando sus vidas en ambas cadenas; veo los mismos tertulianos en ambas televisiones y veo las mismas noticias a la misma hora. ¡Caramba, vaya uniformidad! Las noticias que nos indignan rara vez aparecen en estos medios. 
 
Católico y ateo
Salvo pocas excepciones, en Madrid no noto diferencia entre un católico y un ateo. Los dos últimos ministros del interior (Rubalcaba y Fernández) defienden exactamente lo mismo, a pesar de que uno es de misa dominical y el otro es ateo. Ambos han defendido la valla de Melilla con la misma pasión, y han negado los controles policiales basados en perfiles raciales sin pestañear. Ateo y cristiano trincan lo trincable y mienten con los mismos argumentos. Desconozco la postura de los obispos españoles sobre los grandes temas que nos preocupan y me pregunto porqué cierran sus iglesias mientras hay gente que duermen en la calle. Yo creo que el cabreo de Jesucristo debe ser monumental. Para tener lo que tenemos, no era necesario pasar por la cruz. Y lo más inquietante, si cabe, es pensar que la historia de la iglesia católica ha alcanzado su fin y que este no sólo es el mejor mundo posible; es el único posible.
 
Sindicato y patronal
¿Y qué decir de los sindicatos y patronales? Mismos perros con mismos collares. Sindicatos y patronales almuerzan en la misma mesa y se emborrachan en los mismos bares nocturnos. No resulta fácil distinguir quién es de derecha y quién es de izquierda porque el mercado ha globalizado hasta los mismos vicios. El asturiano enarbolaba la bandera sindicalista en los encuentros del PSOE mientras acumulaba fortunas con procedencia sin aclarar. Igual que la familia del catalán, por mucho que amenace con agitar el árbol para que caigan más manzanas podridas. El patrón de los empresarios españoles que nos acusaba de vivir por encima de nuestras posibilidades resultó ser un auténtico estafador. Lo kafkiano del asunto es que incluso estando en la cárcel sigue viviendo de nuestro esfuerzo. El patrón de los empresarios locales, que acusaba al Estado de derrochar recursos atendiendo a los parados, tenía contratos millonarios con el estado. Las grandes empresas españolas tienen contratos millonarios con el Estado, o sea, con los ciudadanos españoles, y no dudan en acusarnos de vivir de las mamandurrias. Un comisario europeo gana más al mes que todo lo que gana un mileurista español al año. Lo gracioso del asunto es que ese comisario quiere que el estado español nos rebaje más el sueldo. ¿Por qué la propuesta de bajarnos el sueldo viene siempre de aquellos que ganan más que nosotros y que lo primero que hicieron al llegar al sillón de mando fue subirse el sueldo? La del FMI dice que los mileuristas ganan mucho pero ella no es capaz de bajarse ni un euro. No hay huevos para aplicarse el cuento. A veces pienso que tenemos lo que nos merecemos: da igual que me esté jodiendo por todos los lados porque yo sólo quiero saber qué tipo de bragas La Pantoja llevará en su maleta cuando entre en el trullo.