“ADELANTE CON ÁFRICA” es una ONGD que nació en
Los Corrales de Buelna (Cantabria) el dia 10 de septiembre de 2008, por
iniciativa de:
http://adelanteconafrica.blogspot.com.es
D. Evaristo Citeya Jikibila, Fundador
D. Guillermo Gómez Compadre, Presidente
D. Eloy Pedrajo Pérez, Tesorero
Dñª. Ana Saíz Villegas, Secretaria
D. Ignacio Ortega Fernández, Vocal
Yo vengo siguiendo las noticias de esta ONGD gracias a
Ruben G. C. (antiguo compañero de trabajo).
El primer proyecto que se realizó desde “ADELANTE CON
ÁFRICA” fue la adquisición y envío de un tractor y de los aperos de labranza. Pero lo que más me gusta
es la labor del departamento de sensibilización con sus charlas en centros
educativos y asociaciones de mujeres. Por ejemplo: la charla “La Mujer en los
países en Vías de Desarrollo. Proyectos en Femenino” organizada por el
PSOE y UGT de Reinosa dentro de las jornadas de celebración del día de la mujer
y que fue compartida con ADANE. La charla a los chicos de 4º ESO del colegio
Haypo de Santander, titulada "La vida en la RDC: Proyectos de Adelante con África".
Yo no soy partidario de dar dinero o material a los
negroafricanos sin más. Comparto profundamente la idea de que antes de dar el
pescado, es mejor enseñar a pescar. Creo profundamente que la educación y la
formación académica son las únicas herramientas que nos ayudaran a los
africanos salir de nuestra esclavitud antropológica.
Hablando con un sacerdote rwandés, párroco en un
pueblo de Teruel, él me decía: “Para la educación de los chicos, todo lo que
tengo lo comparto con ellos. Pero para dar dinero a alguien para que compre
bienes, ni en broma”.
A no ser que sea en situación de emergencia
humanitaria (catástrofes naturales, guerras,...), la prioridad de las ONGs
debería ser cooperar con la educación de los niños. Recuerdo haber discutido con un misionero
español en los años 1993 en Rwanda sobre la ayuda humanitaria (entonces yo era
maestro de chicos de unos 12-13 años). Por aquel entonces, los fines de semana
ayudaba a los misioneros a dar la comida a los desplazados de guerras. Los desplazados se
levantaban de sus chozas prefabricadas (que por cierto, la última vez que vi a
mis padres estaban en un sitio parecido), y hacían cola para que les diéramos
la comida. ¿Hay algo más
denigrante que esto? Yo les decía a los misioneros españoles (ingenuamente),
que en
lugar de dar comida tenían que hablar con sus hermanos europeos para prohibir
la venta de armas a los rwandeses, dejar de azuzar a los dos beligerantes y
ayudarles a acabar la guerra para que la gente volviera a su tierra y viviera de
su propio sudor.
Yo sigo pensando que la mejor ayuda que necesitamos
los negroafricanos no es el dinero, sino la sensibilización de los europeos
para que entiendan que el negro es un ser humano, igual que el blanco. Para que
las empresas europeas dejen de saquear gratuitamente los recursos naturales de
CONGO (donde colabora “ADELANTE CON ÁFRICA”). El problema no está allí;
quienes debemos cambiar somos los que vivimos en el llamado primer mundo. Por eso creo que
las ONGD deberían dedicar gran parte de sus recursos en sensibilizar a los
occidentales para que respeten los recursos naturales africanos, para que dejen
de vender armas que no disparan jabón para que se limpien los niños; para que
dejen de considerar a los inmigrantes como ilegales (¿qué
pretendemos cuando llamamos alguien ilegal?).
No olvidemos que la esclavitud fue abolida gracias a
la iniciativa de algunos europeos indignados
por la actitud de sus hermanos. Pienso que ONGD como “ADELANTE CON
ÁFRICA”, por pequeña que sea, es capaz de cambiar la mentalidad de muchos cántabros.
Creo
que “ADELANTE CON ÁFRICA”, aunque no tenga una gran bandera que salga en los
medios de comunicación y no esté patrocinada por la Casa Real, puede hacer más
y mejor que esas ONGs multimillonarias que, para sacar algo de dinero, no dudan
en enseñar una foto con un niño acosado por un ejército de moscas y un moco
kilométrico.
¡Indignante!
Indignante por sacar la foto (porque una buena persona, primero espantaría las
moscas, limpiaría el moco al niño, y luego le sacaría una foto). Indignante
porque esa foto refleja la suciedad del corazón de quien la saca. Así pienso
yo.